La Policía Local pondrá “multas de advertencia” en los próximos días, para pasar a sancionar económicamente después

 

Se contará con radares móviles de velocidad, de modo aleatorio, en algunas de las calles más problemáticas

 

 

 

El Ayuntamiento de Cabanillas iniciará la semana que viene una campaña específica de tráfico, para combatir infracciones que se vienen detectando en algunas de las principales calles de la localidad.

 

Se trata fundamentalmente de vías anchas, largas y rectas (como las calles Benalaque, Miguel Hernández, Madrid, o la Avenida de Guadalajara) donde se producen con excesiva frecuencia velocidades muy superiores al límite de 40 km/h establecido para el casco urbano, y donde también se detectan con asiduidad comportamientos poco cívicos, en lo que se refiere a la manera de estacionar los vehículos.

 

La campaña comenzará con una actitud conciliadora por parte de la Policía Local, ya que en las próximas semanas los agentes dejarán una suerte de “multa-advertencia”, sin sanción económica, en aquellos vehículos que encuentren estacionados en doble fila, u ocupando vados permanentes. “Se trata de comportamientos incívicos que están produciendo, en los últimos meses, reiteradas quejas vecinales y de comerciantes en el consistorio”, explica en este sentido el alcalde de Cabanillas, José García Salinas. Pasado este periodo de prueba, se procederá a sancionar económicamente a aquellos conductores que persistan en estos comportamientos, con multas según establecen las Ordenanzas Municipales.

 

En cuanto a la velocidad excesiva que se detecta en algunas de estas calles y avenidas, el Ayuntamiento ya ha iniciado contactos con la Dirección General de Tráfico para utilizar de manera aleatoria sus radares móviles homologados. García Salinas espera que la presencia de estos dispositivos “sea, por sí misma, lo sufcientemente eficaz como para que los conductores que acostumbran a pisar el pedal del acelerador por encima de lo que está permitido, se lo piensen dos veces antes de hacerlo”

 

Hay que señalar que este problema de velocidad excesiva se detecta fundamentalmente en calles que son vías principales de entrada a la localidad, en las que, con frecuencia, a los conductores les cuesta cambiar el modo de conducción tras salir de la carretera e incorporarse al casco urbano. “Hay alguna, como la calle Benalaque, que es una gran recta que une la CM-1007 con el centro del pueblo, en la que vemos a diario conducir a velocidad verdaderamente peligrosa. Hay que tener en cuenta que es una vía que tiene en sus márgenes pasos de cebra, paradas de autobús, parques infantiles y viviendas, es muy transitada por peatones, y tenemos que conseguir que estos no pasen peligro a la hora de cruzarla”, ha declarado el primer edil.

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